La enfermedad de Crohn es un trastorno inflamatorio crónico que afecta principalmente al sistema digestivo, formando parte de las enfermedades inflamatorias intestinales (EII), lo que hace esta enfermedad es inflamar cualquier parte del tracto gastrointestinal*, desde la boca hasta el recto, normalmente se suele concentrar en el intestino delgado y el colon. Esta enfermedad suele provocar: dolor abdominal, diarrea crónica, fatiga y pérdida de peso.
Cabe destacar que esta enfermedad puede aparecer de repente, y los síntomas pueden variar de leves a crónicos, además, puede extenderse a través de todas las capas de la pared intestinal.
Aunque no existe una cura definitiva, la enfermedad de Crohn puede controlarse mediante tratamientos que reducen la inflamación. ¡Sigue leyendo para descubrir cuáles son los tratamientos y consejos para esta enfermedad!
*Tracto gastrointestinal: Tubo formado por los órganos por donde pasan los alimentos y líquidos cuando se tragan y salen por el cuerpo en forma de heces.
Cómo detectar la enfermedad de Crohn
Detectar esta enfermedad puede ser algo complejo, ya que son síntomas que podemos confundir con otras infecciones digestivas. Algunos de los síntomas de la enfermedad de Crohn más comunes son los siguientes:
Dolor Abdominal
El dolor abdominal es uno de los síntomas más frecuente, puede ser constante o aparecer de forma intermitente. Se suele localizar en la parte derecha del abdomen, aunque puede variar según la zona afectada del tracto digestivo. Este dolor empeora siempre después de las comidas y después suele desaparecer.
Diarrea crónica
Las personas que tienen Crohn experimentan diarrea persistente que puede durar varias semanas. Esta diarrea es por la inflamación del intestino, lo que puede dificultar la absorción de líquidos y nutrientes.
Fiebre y fatiga
Al estar inflamado el intestino el cuerpo responde con fiebre, suele ser leve pero persistente. La fatiga es otro síntoma muy común, ya que el cuerpo está contantemente combatiendo la inflamación.
Pérdida de peso y disminución del apetito
La inflamación en el intestino puede afectar a la capacidad que tiene el cuerpo para absorber nutrientes, esto provoca pérdida de peso. Además, el dolor abdominal suele reducir el apetito, lo que provoca la pérdida de peso.
Sangrado o presencia de moco en las heces
Este es un síntoma que preocupa mucho, el sangrado puede ser leve o más abundante, y en algunos casos, las heces pueden presentar moco, esto indica claramente una inflamación más severa del tracto intestinal.
Dolor y problemas articulares
Crohn además de afectar al sistema digestivo, en alguno casos puede afectar a la inflamación en las articulaciones.
Si en algún momento experimentas alguno de estos síntomas durante un periodo prolongado, es esencial ir a tu centro de salud para realizar un diagnóstico adecuado.
Tratamientos para la enfermedad de Crohn
El principal tratamiento de la enfermedad de Crohn se enfoca en reducir la inflamación y aliviar los síntomas que provoca.
Existen varios enfoques terapéuticos:
- Medicamentos antiinflamatorios: Estos medicamentos suelen ser el primer paso en el tratamiento. Los más comunes suelen ser: Corticosteroides y los aminosalicilatos, que sirven para controlar la inflamación.
- Inmunosupresores: Estos fármacos ayudan a reducir la respuesta inmunológica que puede causar la inflamación en el intestino. Aunque pueden tener efectos secundarios y requieren un seguimiento médico.
- Biológicos: Se usan en casos más estrictos, consiste en prohibir proteínas específicas en el cuerpo que provocan la inflamación.
- Cirugía: En casos muy extremos, cuando los medicamentos no hacen su función, cabe la posibilidad de realizar una intervención quirúrgica.
Es importante mantener contacto con tu médico para tomar cualquier medicamento.
Consejos para tratar la enfermedad de Crohn
Además de los tratamientos médicos, te proporciono unos consejos y hábitos saludables que pueden marcar una gran diferencia:
- Dieta equilibrada: Debes evitar alimentos que puedan irritar el intestino, por ejemplo; lácteos, alimentos muy grasos o picantes y comidas altamente procesadas.
Los alimentos bajos en fibra pueden ser más fáciles de digerir durante los brotes. - Controlar el estrés: El estrés puede ser tu peor aliado y empeorar los síntomas de Crohn, por lo que aprender técnicas de relajación como yoga o meditación pueden servir de gran ayuda.
- Hidratación constante: Tienes que mantener siempre una buena hidratación para contrarrestar los efectos de la diarrea.
- Ejercicio regular: Mantenerte activo no solo ayuda a mejorar el estado general de salud, también ayuda mucho a mantener más equilibrada la función intestinal.
Diferencias entre la enfermedad de Crohn y colitis ulcerativa
Aunque ambas sean enfermedades inflamatorias intestinales, tienen varias diferencias:
La enfermedad de Crohn puede afectar cualquier parte del tracto digestivo, desde la boca hasta el recto, y la inflamación en algunas ocasiones puede penetrar en las capas de la pared intestinal, se suele concentrar en el intestino delgado y colon. Sin embargo, la colitis ulcerativa solo afecta al colon (intestino grueso) y la inflamación está limitada a la capa más interna del intestino.
Conclusión
La enfermedad de Crohn es crónica que requiere una atención continua de un especialista. Aunque esta enfermedad no tiene cura, siguiendo adecuadamente los tratamientos puede realizar cambios en el estilo de vida y ayudar a reducir los brotes .
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